Cuando mi hija me pide alitas picantes este es el mejor receton. Están hechas al horno con una base de patatas con piel y acompañado de una salsa para chuparse los dedos. Esta receta se puede emplear para más elaboraciones y sorprender a los tuyos…

Son elaboraciones bastantes sencillas de preparar en cualquier cocina. Este plato nos recuerda a la clásica barbacoa que hacemos con nuestras amistades en la casa rural… Lo mejor de todo es la compañía y disfrutar del día…

A continuación…

Ingredientes:

Elaboración:

Tips para nuestro especiero, cuando tengamos un bote de especias vacío, aprovechamos para rellenar nuestra especia cajún, así tenemos a mano otra versión. En un bol mezclar pimentón de la vera, pimienta blanca molida, pimienta negra molida, ajo en polvo, cebolla en polvo, tomillo, orégano, cayena molida y sal. En el caso de encontrar paprika también vale.

Precalentar el horno a 220º C mientras vamos preparando el adobo de nuestras alitas. En un bol mezclar las especias, salpimentar las alitas de pollo y dejar marinar unas horas en el frigorífico.

Por otro lado, lavar bien las patatas quitándole el exceso de tierra que pueda contener. Secar y cortar en gajos, añadir sal y por ultimo incorporar aceite de oliva virgen extra. Colocar a un lado las patatas cortadas en gajos y en el lado restante colocaremos las alitas adobadas

Con la temperatura que hemos puesto a precalentar, bajar a 190º C y hornear durante 1h, de vez en cuando, removemos las alitas y las patatas para que se hagan por ambos lados.

Y por último una salsa de acompañamiento. En un bol preparamos Mostaza Dijon y unas cucharadas de miel, mezclar bien y reserva.

Nota:
En el adobo de las alitas se puede aromatizar con vino blanco «la sultana», lo dejo como una opción. En mi caso, siempre suelo añadir un vaso de vino blanco