La torrija es un dulce típico de las celebraciones de Cuaresma y Semana Santa en España y varias partes en México; como Zacatecas. Consiste en una rebanada de pan duro (habitualmente de varios días) que es empapada en leche o vino y, tras ser rebozada en huevo, es frita en una sartén con aceite; finalmente, se aromatiza, a gusto, con diversos ingredientes: canela o algún licor, y se endulza con miel, almíbar o azúcar.
Es un alimento de origen humilde que satura pronto al comensal y le mantiene aliviado de la necesidad de probar algún otro plato de carne, sin embargo su uso es acreditado a la cuaresma, época donde los creyentes dejan de comer carne y la torrija (también llamada torreja en sitios como Guerrero, México) la sustituye al comerse con atole de maíz blanco.
Ingredientes:
- Pan de barra que no sea del día
- c/s Huevos
- c/s Leche
- c/s Azúcar
- c/s Canela
- c/s canela en rama
- c/s Aceite de oliva suave
- c/s piel de limón
Elaboración:
Cortamos el pan en rebanadas que no sean ni muy gruesas ni muy finas. En un recipiente amplio infusionar la leche con la piel de limón y la rama de canela hasta que quede templada la leche. Ponemos las rebanadas de pan a remojar en la leche dándoles la vuelta hasta que estén bien empapadas.
Escurrir las torrijas del exceso de leche y batimos huevos, las pasamos por el huevo batido y a continuación las freímos en una sartén con el aceite bien caliente. Las sacamos a un plato con papel absorbente para quitarle el exceso de aceite y lo rebozamos en la mezcla de azucar y canela en polvo y lo vamos colocando en una fuente de servir.
Nota:
Si quieres aromatizar la leche aparte de la piel de limón y la rama de canela se puede añadir anis dulce. Esto es opcional.